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SUSTRACCIÓN Y MOTIVACIÓN

Para las jornadas de la Academia de Ciencias de Buenos Aires de abril 2009 presenté un trabajo relativo a la posibilidad de concretar la pregunta por lo místico, motivado por el estudio del texto La fábula mística de Michel De Certeau. Mas, la investigación filosófica que dicha tarea requería mostraba una incomparable dificultad. Delimitar esta particular experiencia aconteciente, su sentido, y su participación histórica y cotidiana en la vida humana invita al investigador, primeramente, a una reflexión que se cuestione en torno al lugar y la orientación de su interpelar. Pregunté: ¿cuál es nuestro sitio de instalación para el discursivo mirar filosófico frente a lo místico? ¿Qué posibilidades abre para la indagación nuestro modo de preguntar? La estructura del estudio a estas preguntas fue, finalmente, inspirada por Martin Heidegger con el esbozo del curso del 1918-1919 nominado Los fundamentos filosóficos de la mística medieval.
    
Hoy la tarea se me presenta de un modo diferente. Preguntar por la vivencia mística, o bien, por el modo de plenificar vitalmente el sentido original de la escritura mística, a mi parecer supone un territorio ganado por la filosofía en cuanto disciplina reflexiva que atiende a cada especie de vivencia. No obstante, he de admitir que tal sitio permanece tan cerrado al acomodado pensar teórico, y se sustrae de tal modo al programático estudio de textos filosóficos, que sería un despropósito no asumirlo estrictamente en cada preguntar.
   
De manera que mi intención aquí es subrayar la concordancia entre el motivo por el cual nos reunimos hoy como aspirantes a la filosofía a través de nuestros estudios bien modestos o avezados, y el despliegue de la escritura mística que sobrepasa toda determinación cognoscible por las ciencias tradicionales y la lógica. Si bien filosofía y escritura mística se distancian en un sin número de notas, hemos de reconocer la cualidad de la sustracción que caracteriza también a la filosofía, junto a la particularidad de su motivación, que hace yermo todo reposo cotidiano, y todo amparo y contención a través de nuestro marco de creencias. Abrirnos al pensar nos presenta siempre el desafío inquietante donde el preguntar se hace sitio en el hogar sin morada.
   
M. Verónica Arís Zlatar
mvariszlatar@yahoo.com.ar
   
Presentado en: VI Jornadas Nacionales de Filosofía Medieval: La Mística Medieval en el Pensamiento Contemporáneo. Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires, Centro de Estudios Filosóficos Eugenio Pucciarelli. Desde el 26-29 de abril 2011.

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